¡Fantástico! En el fascinante museo submarino de México, admire las estatuas sombrías y aterradoras.
El Museo Subacuático de Arte (MUSA) fue establecido en Cancún, México, en 2008, y se ha convertido en uno de los museos submarinos más grandes y distintivos del mundo. Además de las impresionantes playas y los sitios históricos de la antigua civilización maya, Cancún es reconocido por albergar el museo submarino más grande del mundo, conocido por su belleza artificial excepcionalmente única.
El gobierno municipal de Cancún ha desarrollado un museo submarino con más de 400 esculturas a tamaño real creadas por el artista Jason de Caires Taylor. El objetivo de este proyecto es aumentar la conciencia tanto de los habitantes locales como de los visitantes, así como restaurar el ecosistema marino que ha sufrido degradación en la región de Isla Mujeres.
Este museo ha generado importantes ingresos para la industria turística de Cancún, llegando a alcanzar los $36 millones. Además, ha proporcionado un espacio para la regeneración de los arrecifes de coral en otras áreas de la península de Yucatán, fortaleciendo así su capacidad de resistencia frente a los efectos negativos del cambio climático y los huracanes.
Las esculturas se encuentran sumergidas a una profundidad de entre 20 y 30 metros en las aguas de Isla Mujeres. Los visitantes tienen la opción de bucear en apnea o utilizar trajes de buceo para explorar y apreciar la magnificencia del museo.
Las estatuas están representadas en diferentes temas, formas, poses y expresiones, lo que garantiza que los visitantes tengan una experiencia única.
Las esculturas están hechas de hormigón con un pH neutro con el objetivo de crear un ambiente ideal para que los corales vivan y crezcan.
Después de un tiempo, el coral crecerá gradualmente en las estatuas, creando una belleza que combina el arte natural y el creado por el hombre.
Impresionante obra en el museo submarino de Cancún.
El autor de las obras maestras “Evolución silenciosa” captura los rostros de la población local y los emula en sus estatuas.
Un rincón de la obra “Evolución Silenciosa”.
No solo es el lugar para cultivar especies de coral, las estatuas también albergan muchas otras especies acuáticas.
Cada año, el museo submarino de Cancún atrae a más de 750.000 visitantes.